sábado, 11 de mayo de 2013

NOTIFICACION

Hola a todos: 
Se que he tenido todo esto un poco abandonado últimamente. Han sido unos días en los que apenas he tenido tiempo para relajarme.... época de estudio para los finales...
Pero no os preocupéis, en breve actualizare el blog con algún que otro fragmento de la historia.
Mientras tanto disfrutar a tope con lo que tengo publicado.
Muchas gracias. 
 
 
 

jueves, 2 de mayo de 2013

Mini fragmento


Durante horas Drew condujo sin parar. Fue un viaje bastante tranquilo, sin incidencias por el camino. Por suerte no nos cruzamos con ninguno de ellos.
 La noche cayó sobre nosotros. Las estrellas bailaban creando preciosas siluetas en el oscuro cielo. Hacía mucho tiempo que no observaba de esa manera el cielo.
Cuando éramos pequeños papá solía llevarnos de acampada y por las noches, acurrucados los tres juntos, solíamos imaginar diferentes siluetas y formas en el cielo. 
 Como echaba de menos aquella época…
- Drew, creo que deberíamos acabar el viaje por hoy. Creo que estamos cerca de una de las zonas “seguras”.
- De acuerdo señorita. Un descanso no me vendrá mal…Además, tengo curiosidad por ver como de “segura” es esta zona.- dijo mientras enfatizaba en las últimas palabras.



domingo, 28 de abril de 2013

Continuación CAP-1.2

"Para que lo entendáis os invito a que disfrutéis desde el principio..."
No tardamos mucho en ponernos en marcha. Montamos todo en nuestro Jeep y emprendimos nuestro viaje hacia casa.
No sabíamos cuanto había cambiado Denver desde nuestra última visita. Me entristecía pensar que ya no sería igual que en el pasado. Muchas cosas habían cambiado desde aquel día hace cuatro años.
Las calles no eran tan seguras como antes, era muy difícil confiar en la gente, nada era igual ni lo sería…
            Nos deparaba un largo viaje hasta Denver. Teníamos que viajar con cuidado ya que ellos podrían aparecer en cualquier momento. No les teníamos miedo. Siempre nos habíamos considerado buenos en nuestro ámbito de trabajo y estábamos preparados.
            Era un día caluroso, los rayos de sol se peleaban por  posarse en nuestra piel.
Drew conducía aquel Jeep amarillo mientras que yo vigilaba los alrededores.
El aire golpeaba nuestros rostros y no parecía haber peligro alguno cerca de nosotros.
Todo estaba muy tranquilo, podía oírse todo sonido ajeno a nosotros; incluso aquellos sonidos en los que no reparábamos en nuestro día a día.  
Desde que ellos vinieron todo había cambiado, la vigilancia y seguridad de las calles había aumentado en el último año. La gente no solía dejar verse tanto como antes. Esta era una época en la que  todo el mundo se reunía en sitios concretos, espaciosos y llenos de seguridad. Prácticamente vivíamos en una sociedad que se escondía debido al miedo.
Yo no lo entendía. ¿Cómo podíamos ser tan débiles ante esta amenaza? Muy pocos nos habíamos enfrentado a ellos y no muchos habíamos salido bien parados de la situación.
Pero Drew lo tenía claro, y por supuesto, él me había enseñado bien. Los dos estábamos de acuerdo en que alguien tenía que parar esta situación antes de que fuera a peor. Poco a poco todo esto se nos estaba yendo de las manos.  ¿Supondría esto nuestra extinción o acabaríamos siendo sus esclavos? No, no, no…era una idea que ni se me podía pasar por la cabeza. Ni a mí ni a ningún ser humano.
Estaba sumergida en mis pensamientos. Hacía mucho tiempo que no me sentía tan relajada y tranquila; ningún ruido alrededor, el calido aire acariciando mi piel…
- ¿En que piensas Shaz? – me dijo mientras me vigilaba por el retrovisor.
Desconecté mi mente de todos aquellos pensamientos y acercándome al asiento del copiloto apoyé mis brazos sobre el respaldo.
-  No sabía que fueras tan cotilla Andrew…- le contesté en un tono burlón.- Solamente pensaba en lo diferente que se ha vuelto todo esto...
Él asintió con la cabeza.
- Lo sé. Espero que algún día todo vuelva a la normalidad. No dejaremos que se salgan con la suya…
Éramos conscientes de que en cualquier momento podríamos encontrarnos con alguno de ellos. Él peligro era un compañero más en nuestras vidas.


viernes, 26 de abril de 2013

CAP.I -La visita (Parte 1.2)

"Os dejo un fragmento de la primera parte del capitulo 1. Espero que os guste y espero todo tipo de crítica o consejo. No tardaré mucho tiempo en actualizarlo...Bueno disfrutad con la lectura!!" 
Todavía faltaban tres días pero, por increíble que me pareciera, había pasado otro año más. El 14 de mayo era una fecha que nos perseguía desde hacía diez años y por muy duro que se me hiciera, había aprendido como actuar cuando se acercaba esta fecha.
Había llegado la hora de hacer una visita a nuestros padres y aún teníamos muchas cosas que preparar. Drew se encargaba de todo: el coche, comprar la comida necesaria para el largo viaje…incluso de las flores. Para entonces se había convertido en una especie de experto a la hora de escogerlas.
Yo, en cambio, me encargaba de hacer las maletas y de buscar rutas alternativas para la visita. Nunca se me había dado bien buscar estas cosas, pero Drew se fiaba de mí. Siempre encontraría el camino indicado para volver a casa, a nuestro hogar.
Desde que era una niña me había gustado Denver, cuando nada importaba y me divertía con mis amigos en el parque. Allí estaba nuestro hogar.
Nunca había entendido la posición de Drew, pero si él eligió abandonar… ¿qué más podía hacer yo?
Él era mi hermano mayor, mi familia.
-          ¡Shaz, date prisa! –me grito desde la cocina.
-          Ya sabes que me tomo mi tiempo para buscar la mejor ruta… ¿Preferirías hacerlo tu? – le reproché.
Él rió y negó con la cabeza.
Tras una larga hora planificando diferentes trayectos hacia Denver había acabado. Un escalofrío de satisfacción sacudió mi cuerpo, desde los dedos de los pies hasta bailar con las falanges de mis manos. La sensación se extendió hasta dibujar  una sonrisa de oreja a oreja en mi rostro.
Salí del pequeño despacho que teníamos en casa y me dirigí al salón.
El delicioso olor de la lasaña que había estado preparando Drew inundaba las habitaciones de la casa.
Cerré los ojos e inhalé el exquisito aroma hasta que mis pulmones se llenaron.
Repetí la acción hasta que Drew asomó la cabeza por la puerta de la cocina y me llamó para cenar.
Me senté frente a él en la pequeña mesa donde estaba la cena servida. Me rugieron las tripas y ambos reímos.
-          Bueno Shaz, mañana nos toca madrugar. Cualquiera diría que ha pasado otro año, echare de menos Los Angeles por una temporada. – comentó mientras se llevaba un trozo de lasaña a la boca.
No me gustaba nada que me lo recordase. Agaché la cabeza y empecé a destrozar muy lentamente la lasaña con ayuda del tenedor.
-          Drew…eh...- levanté la cabeza y mire fijamente a sus verdes ojos.- He estado reflexionando y creo que quiero volver a casa…a Denver.
Su rostro palideció en cuanto pronuncié mis últimas palabras. No se lo podía creer.
Tras unos minutos de silencio, su rostro volvió a coger el tono bronceado de su piel.
-          Tienes razón. – asintió con la cabeza. Abrí los ojos debido a la sorpresa de su respuesta- Ya han pasado diez años, es hora de que pase pagina y deje de culparme.
Me devolvió una dulce y calida sonrisa. Las lágrimas comenzaron a brotar de mis ojos y descendieron lentamente acariciando mi rostro.
Me levanté y abracé a mi hermano. Sabía que lo necesitaba. Ahora sí, sabía porque Drew había abandonado Denver. Nunca me lo había contado pero tras la última conversación lo comprendí.
Llevaba culpándose diez años y yo no había sido capaz de notarlo. ¿Cómo podía considerarme una buena hermana? Él no tuvo la culpa de nada.
-          Drew, tu no tienes la culpa. Nunca la has tenido.- dije entre sollozos.
Nunca lo había visto así.
-          Sharon… gracias.- contestó mientras que apretaba sus fuertes brazos contra mí.
Me separó de él y secó mis lágrimas. Paso sus dedos por mis ojos y sonriendo me dio un cariñoso beso en la frente.
Tras la cena decidimos ir a dormir. Nos deparaba un día muy largo, pero sería un nuevo día. 

Tumbada en mí cama no podía dejar de pensar en las palabras de Drew. Se sentía culpable, y siempre se había sentido así. Diez años con esa carga, yo no lo podría haber soportado.
Ocurrió el 14 de mayo del mismo año que Drew comenzó en la universidad. Él siempre había sido un joven rebelde y nunca le había gustado obedecer las normas. Como era habitual, Peter O’Brien, uno de los mejores amigos de Drew, celebraba una fiesta en su casa. 
El alcohol manchaba la sangre que corría por las venas de todos aquellos que bailaban y disfrutaban de la gran noche.
Debió de ser una gran fiesta pero las cosas se torcieron. Cuando la policía interrumpió en la fiesta Drew y otros cuantos más estaban enzarzados en una pelea. Para cuando los jóvenes de la pelea se dieron cuenta estaban todos detenidos dirección al calabozo.
Fue el timbre del teléfono lo que despertó a papá. Tras el teléfono estaba Drew. Este le contó lo sucedido y le rogó para que pagase la fianza.
Nunca había escuchado la voz de papá con ese tono. Estaba muy enfadado.
Yo solamente tenía diez años y no era consciente de lo que estaba sucediendo a mí alrededor. Mis padres decidieron dejarme en casa de la Sra.Belcher, nuestra vecina.
Pasaron ocho horas hasta que Drew me recogió. Su cara estaba descompuesta y parecía cansado.
No fue el quien me lo contó, fue la Sra.Belcher.
Papá y mamá se dirigían al departamento de policía de Denver. Todo ocurrió en el cruce de Bulevar Speer y la calle Stout.
Había perdido la noción del tiempo entre los pensamientos que inundaban mi mente. ¿Seguiría despierta o estaría durmiendo? No era capaz de distinguirlo.
            Él pitido de la alarma consiguió despertarme. Claros rayos de sol  que se filtraban por la ventana alumbraban completamente la habitación.
Pasaron quince minutos hasta que decidí levantarme. Mi cuerpo se estiró en cuanto puse los pies en el frío suelo. Levanté los brazos y moví el cuello hacia los dos lados. ¡Que bien me sentía…! Todo mi cuerpo craqueó destensándose.  
Por el olor a café recién hecho supuse que Drew ya se había levantado y preparado.
            No tardamos mucho en ponernos en marcha. Montamos todo en nuestro Jeep y emprendimos nuestro viaje hacia casa.
No sabíamos cuanto había cambiado Denver desde nuestra última visita. Me entristecía pensar que ya no sería igual que en el pasado. Muchas cosas habían cambiado desde aquel día hace cuatro años.
Las calles no eran tan seguras como antes, era muy difícil confiar en la gente, nada era igual ni lo sería…
            Nos deparaba un largo viaje hasta Denver. Teníamos que viajar con cuidado ya que ellos podrían aparecer en cualquier momento. No les teníamos miedo. Siempre nos habíamos considerado buenos en nuestro ámbito de trabajo y estábamos preparados.
            Era un día caluroso, los rayos de sol se posaban en nuestra piel.
Drew conducía aquel Jeep amarillo mientras que yo vigilaba los alrededores.
El aire golpeaba nuestros rostros y no parecía haber peligro alguno cerca de nosotros.
Todo estaba muy tranquilo, podía oírse todo sonido ajeno a nosotros; incluso aquellos sonidos en los que no reparábamos en nuestro día a día.


miércoles, 17 de abril de 2013

Capitulo I (pequeño fragmento)

 Hola a todos:
No he tenido mucho tiempo para poder actualizar el blog. Os adjunto un pequeñito fragmento de la historia.Esta noche espero continuar con ella y mañana imagino que lo tendré subido al blog.Espero que os guste.. :D
P.D: Espero cualquier tipo de critica por vuestra parte... Gracias 

 Había perdido la noción del tiempo entre los pensamientos que inundaban mi mente. ¿Seguiría despierta o estaría durmiendo? No era capaz de distinguirlo.
Él pitido de la alarma consiguió despertarme. Claros rayos de sol  que se filtraban por la ventana  alumbraban completamente la habitación.
Pasaron quince minutos hasta que decidí levantarme. Mi cuerpo se estiró en cuanto puse los pies en el frío suelo. Levanté los brazos y moví el cuello hacia los dos lados. ¡Que bien me sentía…! Todo mi cuerpo craqueó destensándose.  
Por el olor a café recién hecho supuse que Drew ya se había levantado y preparado.
No tardamos mucho en ponernos en marcha. Montamos todo en nuestro Jeep y emprendimos nuestro viaje hacia casa.



lunes, 15 de abril de 2013

CAPITULO I – La visita (Parte 1)

Todavía faltaban tres días pero, por increíble que me pareciera, había pasado otro año más. El 14 de mayo era una fecha que nos perseguía desde hacía diez años y por muy duro que se me hiciera, había aprendido como actuar cuando se acercaba esta fecha.
Había llegado la hora de hacer una visita a nuestros padres y aún teníamos muchas cosas que preparar. Drew se encargaba de todo: el coche, comprar la comida necesaria para el largo viaje…incluso de las flores. Para entonces se había convertido en una especie de experto a la hora de escogerlas.
Yo, en cambio, me encargaba de hacer las maletas y de buscar rutas alternativas para la visita. Nunca se me había dado bien buscar estas cosas, pero Drew se fiaba de mí. Siempre encontraría el camino indicado para volver a casa, a nuestro hogar.
Desde que era una niña me había gustado Denver, cuando nada importaba y me divertía con mis amigos en el parque. Allí estaba nuestro hogar.
Nunca había entendido la posición de Drew, pero si él eligió abandonar… ¿qué más podía hacer yo?
Él era mi hermano mayor, mi familia.
-          ¡Shaz, date prisa! –me grito desde la cocina.
-          Ya sabes que me tomo mi tiempo para buscar la mejor ruta… ¿Preferirías hacerlo tu? – le reproché.
El rió y negó con la cabeza.
Tras una larga hora planificando diferentes trayectos hacia Denver había acabado. Un escalofrío de satisfacción sacudió mi cuerpo, desde los dedos de los pies hasta bailar con las falanges de mi mano. La sensación se extendió hasta dibujar  una sonrisa de oreja a oreja en mi rostro.
Salí del pequeño despacho que teníamos en casa y me dirigí al salón.
El delicioso olor de la lasaña que había estado preparando Drew inundaba las habitaciones de la casa.
Cerré los ojos e inhalé el exquisito aroma hasta que mis pulmones se llenaron.
Repetí la acción hasta que Drew asomó la cabeza por la puerta de la cocina y me llamó para cenar.
Me senté frente a él en la pequeña mesa donde estaba la cena servida. Me rugieron las tripas y ambos reímos.
-          Bueno Shaz, mañana nos toca madrugar. Cualquiera diría que ha pasado otro año, echare de menos Los Angeles. – comentó mientras se llevaba un trozo de lasaña a la boca.
No me gustaba nada que me lo recordase. Agaché la cabeza y empezé a destrozar muy lentamete la lasaña con ayuda del tenedor.
-          Drew…eh...- levanté la cabeza y mire fijamente a sus verdes ojos.- He estado reflexionando y creo que quiero volver a casa…a Denver.
Su rostro palideció en cuanto pronuncié mis últimas palabras. No se lo podía creer.
Tras unos minutos de silencio, su rostro volvió a coger el tono bronceado de su piel.
-          Tienes razón. – asintió con la cabeza. Abrí los ojos debido a la sorpresa de su respuesta- Ya han pasado diez años, es hora de que pase pagina y deje de culparme.
Me devolvió una dulce y calida sonrisa. Las lágrimas comenzaron a brotar de mis ojos y descendieron lentamente acariciando mi rostro.
Me levanté y abracé a mi hermano. Sabía que lo necesitaba. Ahora sí, sabía porque Drew había abandonado Denver. Nunca me lo había contado pero tras la última conversación lo comprendí.
Llevaba culpándose diez años y yo no había sido capaz de notarlo. ¿Cómo podía considerarme una buena hermana? Él no tuvo la culpa de nada.
-          Drew, tu no tienes la culpa. Nunca la has tenido.- dije entre sollozos.
Nunca lo había visto así.
-          Sharon… gracias.- contestó mientras que apretaba sus fuertes brazos contra mí.
Me separó de él y secó mis lágrimas. Paso sus dedos por mis ojos y sonriendo me dio un cariñoso beso en la frente.
Tras la cena decidimos ir a dormir. Nos deparaba un día muy largo, pero sería un nuevo día. 

Tumbada en mí cama no podía dejar de pensar en las palabras de Drew. Se sentía culpable, y siempre se había sentido así. Diez años con esa carga, yo no lo podría haber soportado.
 Ocurrió el 14 de mayo del mismo año que Drew comenzó en la universidad. Él siempre había sido un joven rebelde y nunca le había gustado obedecer las normas. Como era habitual, Peter O’Brien, uno de los mejores amigos de Drew, celebraba una fiesta en su casa. 
El alcohol manchaba la sangre que corría entre las venas de todos aquellos que bailaban y disfrutaban de la gran noche.
Debió de ser una gran fiesta pero las cosas se torcieron. Cuando la policía interrumpió en la fiesta Drew y otros cuantos más estaban enzarzados en una pelea. Para cuando los jóvenes de la pelea se dieron cuenta estaban todos detenidos dirección al calabozo.
Fue el timbre del teléfono lo que despertó a papá. Tras el teléfono estaba Drew. Este le contó lo sucedido y le rogó para que pagase la fianza.
Nunca había escuchado la voz de papá con ese tono. Estaba muy enfadado.
Yo solamente tenía diez años y no era consciente de lo que estaba sucediendo a mí alrededor. Mis padres decidieron dejarme en casa de la Sra.Belcher, nuestra vecina.
Pasaron ocho horas hasta que Drew me recogió. Su cara estaba descompuesta y parecía cansado.
No fue el quien me lo contó, fue la Sra.Belcher.
Papá y mamá se dirigían al departamento de policía de Denver. Todo ocurrió en el cruce de Bulevar Speer y la calle Stout.

viernes, 12 de abril de 2013

INTRODUCCION

No es la primera vez que me pongo manos a la obra para crear un blog, pero si que es la primera vez que lo publico.
Finalmente me he atrevido. Aquí estoy, dispuesta a mantener con vida mi "Fabrica de relatos"!!

Siempre me ha atraído la idea de escribir historias y he de confesar que no es la primera vez que intento escribir una hasta el final. Un montón de ideas (originales, creativas, divertidas...) suelen inundar mi mente y siempre me gusta anotarlas en mi cuaderno de notas.
Debido a todo esto, creo que ha llegado el momento de empezar a asentar la cabeza y emprender una nueva aventura con todos los que leáis el blog; sois todos bienvenidos.

Cada un periodo de tiempo, publicaré parte de la nueva historia que estoy escribiendo. Podréis darme vuestra opinión e ideas para mejorarlo. ¡¡Todo lo que se os ocurra!!
Os lo agradecería mucho. 
No se si alguien llegará a leerlo, pero aún así aquí lo tendréis... expuesto para todos vosotros.

Acerca de la historia... 
Esta historia es la que le da sentido al blog. Creo que sino hubiera sido por ella no hubiera empezado con la "Fabrica de relatos".

Sobre la historia he de decir que principalmente no tiene un titulo. Nunca he sabido si es algo que se pone al principio o al final...

Por otro lado, me gustaría llegar a escribir un escrito parecido a una novela. No me gustaría que se quedara tan corto como para ser un cuento. De todos modos, todo se verá...


P.D: Comentadme todo lo que penséis sobre la historia. Si os gusta, nuevas ideas, puntos de mejora,etc.